Una poesía tan corta que no es poesía

La poesía corta o poesía breve busca a través de la combinación de palabras causar profundidad e impacto a aquellos que se atreven a leerlas, incluso, en tan sólo una línea se puede profundizar y brindar una lección emocional.

Una de las tradiciones poéticas más bellas de Japón es el Haiku, que nos permite quedar atrapados en una imagen llena de poder, reflexión, tragedia o cualquier otra sensación.

Pensando que la poesía corta, la metáfora o la imagen es una técnica o recurso que suele utilizarse en los libros, debe tener, como mínimo, la capacidad de transmitir ese mensaje a sus lectores.

La obra poética de Myriam Moscona es el claro ejemplo de como hacer poesía corta y fracasar en el intento de manera magistral. Los poemas escritos en su libro “El que nada” son un ejemplo que lo que significa ser un mal escritor avalado por las instituciones gubernamentales de cultura mexicana.

Experimentar las sensaciones de estar inmerso en la profundidad del agua, o comenzar a morir de ahogamiento son algunos de los conceptos o temas que trata de explorar la autora a través de la poesía breve, sin embargo, desde el primer poema sabes que todo va a terminar mal, cada poema es un intento de atrapar la brevedad, pero al no lograrlo solo queda en ridículo exponiendo sus terribles fallas como escritora, pero esto todavía puede ser peor.  

Leer poemas de 5 palabras, de 7 palabras sin rima, ni métrica, con conceptos que tratan de rayar en lo intelectual subestimando la inteligencia de las personas hacen evidente que estos no son poemas, no son absolutamente nada más que palabras vertidas a lo pendejo, no tienen ni siquiera la capacidad poética de ser llamados versos.

Y si esto te hace querer defender a una escritora que va a timar a sus lectores, al menos cuestiona el precio de semejante fracaso. Más de 150 pesos en 64 cuartillas de las cuales solo 10 son necesarias para leer sus fracasos poéticos, un verdadero fraude editorial que además tiene el nombre de Editorial ERA.

“El que nada” debería llamarse “Nada” porque absolutamente no lees nada. Esta nueva poesía del nuevo siglo (publicada en 2006) forma parte de los terribles estragos del gobierno y las editoriales que solo se llenaron los bolsillos para ofrecer a su pueblo libros costosísimos que además no tienen nada, para que personajes mediocres como el Poemojis (Dante Tercero) tenga más que ofrecer que una escritora reconocida por las instituciones quiere decir que la poesía mexicana esta de la mierda, literal, en la MIERDA.

Haga un favor, si tiene este libro límpiese el culo con el o alimente el fuego de su fogata, la poesía se lo agradecerá.